96|Francisco Sánchez Muniz y Bernabé Sanz
ha señalado como agente estresante suave, que incrementa ligera, pero de forma
continua los niveles de corticoides permitiendo al animal una mejor adaptación a
factores deletéreos, a través de elevar la actividad de genes que protegen a las
células de la acción dañina de agentes dañinos. Se ha propuesto que la restricción
calórica a través de la desacetilación de histonas silenciaría regiones del genoma,
haciéndolas inaccesibles para factores de transcripción y por tanto convirtiéndolas
transcripcionalmente en inactivas. En el mecanismo interviene en concreto de
proteínas reguladoras de la información silente denominadas SIR (del inglés
silent
information regulator
).
El ayuno disminuye los niveles de mARN de insulina, aspecto de indudable
importancia en la hiperinsulinemia prevalente en el obeso. Los beneficios de la
reducción de energía se explica además porque una sobrecarga de nutrientes
(exceso de glucosa, exceso de aminoácido y energía) conduce a hiperestimulación
del complejo mTOR y del S6K-‐1 altamente implicados en la síntesis proteica y en la
lipogénesis, pero cuya hiperexpresión conduce a inhibición del sustrato 1 del
receptor de insulina (IRS-‐1) por hiperfosforilación promoviendo resistencia a la
insulina.
Número y reparto de comidas.
Debe respetarse el
horario y número de
comidas
para evitar fenómenos de tipo rebote (Tabla 1)
.
El ayuno prolongado que
se promueve al saltarse una o varias comidas (muy frecuente de desayunos y/o
cenas) se asocia con eficacia en mecanismos de reserva de energía y de
almacenamiento de grasa. Además, la reducción del número de comidas hace muy
dificultoso cubrir objetivos nutricionales (p. ej. 5 veces al día frutas más verduras)
e incrementa el consumo de alimentos grasos y reduce el de los alimentos de
volumen que inciden, entre otros aspectos, en un peor perfil lipoproteico de los
consumidores.
El reparto de la energía y nutrientes (p. ej. hidratos de carbono) en un
mayor número de comidas mejora la respuesta insulinémica a la dieta y reduce,
por tanto, el estatus hiperinsulinémico y la resistencia a la insulina del obeso.
Aportar algo de nergía y nutrientes en la última colación o post-‐cena parece
importante ya que evita en sobremanera la posible hipoglucemia y sensación de
ayuno y por tanto el atracón en el desayuno del siguiente día.