Contaminación y obesidad|271
correspondientes controles, y esta frecuencia se incrementó aún más por posterior
tratamiento
in vitro
con TBT o ROSI. La capacidad de estas células tratadas con
TBT o ROSI, para diferenciarse en células del hueso estuvo inhibida. La capacidad
de TBT o ROSI de inducir la adipogénesis en células MSC o preadipocitos 3T3-‐L1
fue totalmente dependiente de la activación del receptor activado por
proliferadores de peroxisomas (PPARγ), sugiriéndose que los efectos
in vivo
de
estos compuestos han de depender de igual manera del PPARγ.
De esta manera, los receptores activados por los proliferadores de
peroxisomas (PPAR) son objetivos de los obesógenos.
El mecanismo implicado en la adipogénesis promovida por TBT está
apoyado por la evidencia de que la TBT es un agonista para PPARγ y RXR. Ensayos
de enlace competitivo han mostrado que la TTBT tiene afinidad comparable a los
agonistas RXR sintéticos por el RXR. Por tanto, se ha propuesto que TBT actúa a
través del RXR para promover la adipogénesis y la obesidad. A partir de estos
estudios, se puede concluir que la estimulación de la adipogénesis en MSC y líneas
celulares por ROSI o TBT requiere la activación de PPARγ.
Como ya anteriormente se comentó que PPARγ es el principal regulador de
la adipogénesis, está claro que la activación de PPARγ por los EDC supone un
riesgo potencial de padecer obesidad. Sin embargo, la TBT no es el EDC más común
al que se encuentran expuestos los humanos.
Además de sus efectos sobre los adipocitos y las MSC, el PPARγ juega un
papel importante en el cerebro controlando el apetito y el metabolismo en
respuesta a una dieta elevada en grasa. La activación de PPARγ en cerebro,
conduce a un aumento de la ingestión de grasas y consecuente aumento en el peso
corporal, mientras que el bloqueo de PPARγ o pérdida de la función de PPARγ
conduce a una disminución de la ingesta de dieta rica en grasa, pero no de la dieta
normal. A partir de estas investigaciones, se puede concluir que la regulación
tisular específica de la acción de los PPARγ puede jugar un importante papel en el
resultado de la exposición de agentes químicos que regulan el PPARγ y en la
respuesta del organismo a excesos en la dieta. Investigaciones futuras han de
estudiar otros disruptores de PPARγ, como también de las vías moleculares