Bartolomé Ribas Ozonas|421
añadir que la diabetes es un factor de riesgo para la periodontitis, definida como
una infección crónica de la cavidad oral que puede inducir a bacteriemia con
respuesta inmune inflamatoria, a nivel local y sistémico. Por ello se aconseja la
restricción calórica
en las personas obesas que puedan heredar otras patologías,
para que se mantengan en su peso ideal por tener predisposición hereditaria a
padecerlas. No solo por obesidad, sino también pueden desencadenarse por
diversos factores como infecciones, intervenciones quirúrgicas, el embarazo, la
menopausia, estrés y por emociones traumáticas. La enfermedad en sus inicios
presenta síntomas leves, por lo que muchas personas viven con ella durante
muchos años sin saber que la padecen, lo que impide que sean atendidas, y se
favorezca que la enfermedad progrese hasta que los síntomas se vuelven más
notorios. Los obesos deben seguir un tratamiento preventivo de su desarrollo, con
una dieta adecuada, ejercicio regular y controles médicos periódicos. La American
Diabetes Association (2012), proporciona las pautas y criterios de diagnóstico de
la diabetes, uno de los cuatro es la hemoglobina glicosilada (HbA1c) mayor de
6,5%.
Restricción calórica y ciertas patologías
Se dispone de datos experimentales sobre la interrelación de la obesidad y
la periodontitis, ambas envuelven un estado hiperinflamatorio y un metabolismo
lipídico aberrante que prevalece en la obesidad y en el sobrepeso, así como
resistencia a la insulina, con pérdida de tejido de soporte periodontal, por lo que la
restricción calórica es también aconsejable. Los adipocitos secretan adipoquinas
importantes en el control del apetito y peso corporal. Una de estas citoquinas es la
leptina, que debe su función en el control del peso corporal a través de la
regulación del apetito y la termogénesis. Además de hormona de la delgadez, es
protectora frente a la obesidad e implicada en el Síndrome metabólico y en la
periodontitis. Los adipocitos segregan también otras citoquinas, como la
adiponectina y la resistina; la primera presenta bajos niveles en las patologías
mencionadas, mientras que la segunda es proinflamatoria y está asociada a la
resistencia a la insulina. Sin embargo, algunos investigadores señalan que el
mediador más importante asociado con la obesidad y la resistencia a la insulina es