Papel del tejido adiposo blanco, marrón y perivascular...|305
niveles intracelulares de AMPc y estimula la fosforilación activadora (P-‐Ser 552),
catalizada por la proteína quinasa activada por AMPc (PKA) de la HSL. Sin
embargo, la activación de los receptores α2 adrenérgicos, favorece la reducción de
los niveles intracelulares de AMPc, produciendo una menor activación de PKA y
por tanto, de HSL. Así, las catecolaminas tienen un efecto dual sobre la lipólisis, y
su efecto neto depende del balance entre los receptores α2 y β adrenérgicos.
Otra de las hormonas inhibidoras de la lipólisis, es la insulina, que induce la
activación de PI3K y de la fosfodiesterasa III, que a su vez produce la inactivación
de AMPc. En adipocitos de pacientes obesos, la lipólisis basal está aumentada y
falla la lipólisis estimulada por catecolamina además de existir un descenso en la
expresión de HSL. Se ha descrito que alteraciones en la lipólisis inducidas por
catecolaminas puede tener un papel importante en el desarrollo de la obesidad en
humanos, así como sus complicaciones metabólicas y vasculares asociadas. La
capacidad lipolítica parece tener un componente hereditario, aunque también
puede verse afectada por el propio sobrepeso y por el grado de actividad física.
Asimismo, se ha descrito defectos de la HSL en familias de obesos y polimorfismos
de los genes para HSL y para los receptores adrenérgicos β2 y β3 en asociación a la
obesidad humana. Los adipocitos de pacientes obesos se caracterizan por
presentar niveles altos de receptores adrenérgicos α2 y un ratio elevado de
receptores adrenérgicos α2/β. Además, en modelos animales se ha demostrado
una correlación positiva entre el grado de obesidad y el ratio de receptores
adrenérgicos α2/β.
El tejido adiposo blanco como órgano endocrino
El tejido adiposo blanco no solo es un órgano de reservorio de energía sino
también un órgano secretor de ciertas moléculas que tienen una acción endocrina,
paracrina y autocrina. Algunas de estas moléculas secretadas por los adipocitos
están implicadas en la regulación del peso corporal (leptina, adiponectina), en la
respuesta inflamatoria generada localmente en una situación de obesidad (TNF-‐
α
,
IL-‐6 e IL-‐1β), en la función vascular (Ang II y PAI-‐1) o reproductora (estrógenos,
entre otras).