An. Real. Acad. Farm. vol 80 nº 4 2014 - page 60

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recuperación, respectivamente; las áreas hiperintensas (intensidad de señal
superior a tres veces la desviación estándar del miocardio remoto sano) definió el
AAR y la escara. El VI se dividió en 16 segmentos y a cada segmento se le asignó
una puntuación del cero al cuatro, teniendo en cuenta el porcentaje de miocardio
cicatrizado (0- sin cicatriz, 1- menos del 25% de cicatriz, 2- del 25 al 50% de
cicatriz, 3- del 50 al 75% de cicatriz, 4- más del 75% de cicatriz). La puntuación
final (el índice de transmuralidad de la cicatriz) fue calculado como la suma de los
16 segmentos. El miocardio preservado se calculó como la diferencia entre el área
en riesgo (edema medido en secuencias SE potenciadas en T2) y el tamaño de la
cicatriz (medida a partir del realce tardío de gadolinio). El índice de miocardio
preservado del miocardio se calculó como [Área en Riesgo (g) – Tamaño de IAM
(g)] / Área en Riesgo (g) y expresado como porcentaje del VI.
2.5. Ecocardiografía
Realizamos ecocardiografía 2D con un sistema iE33 con transductor S5
(Philips Medical Systems, Andover, MA) de acuerdo con las recomendaciones de la
Sociedad Americana de Ecocardiografía y de la Sociedad Europea de
Ecocardiografía (24,25). Las imágenes fueron analizadas con el software comercial
Q-Lab (Philips Medical Systems, Andover, MA).Las imágenes ecocardiográficas en
3D del volumen total se adquirieron con este mismo sistema iE33 utilizando un
transductor X3 (Philips Medical Systems, Andover, MA). Se tuvo un especial
cuidado a la hora de incluir la cavidad del VI dentro del volumen piramidal del
transductor. Los ajustes para la adquisición de la imagen fueron optimizados para
una visualización óptima del endocardio y al menos se adquirieron y guardaron
tres datos para las posteriores medidas. La imagen en 3D de la superficie del
endocardio se construyó de una forma semiautomática a lo largo del ciclo cardiaco.
Seguidamente se ajustó manualmente la superficie si era necesario. Para
determinar la deformación global del miocardio, realizamos un análisis de strain
3D utilizando el software 4D (Tom Tec Imaging Systems, Germany). Se
seleccionaron vistas apicales a diferentes niveles de dos-cámaras, cuatro-cámaras
y eje corto al final de la diástole. El VI se dividió en 16 segmentos de tres
dimensiones usando una segmentación estándar. Se midieron los strains
longitudinal (LS), circunferencial (RS) y radial (RS) globales en 3D y se hizo la
media de los 16 segmentos. El índice de esfericidad del VI se calculó como el
cociente eje mayor (longitudinal) del VI / eje menor (transversal) del VI en un eje
apical de cuatro-cámaras (Figura 5C), como estaba descrito previamente (26).
Calculamos el grosor relativo de la pared como 2 x Grosor de la Pared Posterior /
Diámetro del VI al final de la diástole (26).
2.6. Hemodinámica invasiva con microcatéter
Las curvas de presión-volumen del VI se obtuvieron un mes después del
infarto e inmediatamente antes del sacrificio para determinar las diferencias
1...,50,51,52,53,54,55,56,57,58,59 61,62,63,64,65,66,67,68,69,70,...134
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