Page 24 - Anales RADE vol I n 1
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tejido adiposo marrón interescapular. El papel de las proteínas C/EBP en la
adipogénesis del tejido adiposo marrón parece también evidente ya que ratones
que carecen de C/EBPα o de C/EBPβ y C/EBPδ, presentan una acumulación de
lípidos reducida en estas células y una expresión disminuida de UCP-1. El receptor
PPARα también está altamente expresado en el tejido adiposo marrón y dado que
PPARα juega un papel muy relevante en la β-oxidación mitocondrial de los ácidos
grasos y que este proceso es muy importante en el tejido adiposo marrón, es
bastante probable que PPARα esté también jugando algún papel en este proceso. El
70% del volumen del adipocito marrón está ocupado por depósitos lipídicos.
Además de adipocitos, el tejido adiposo marrón incluye células endoteliales,
fibroblastos, células perivasculares, mesenquimáticas, preadipocitos, mastocitos y
células de Schwan. Se cree que las células mesenquimáticas podrían dar lugar a las
células precursoras de los adipocitos.
El proceso de termogénesis en los adipocitos marrones se inicia por
liberación de ácidos grasos procedentes de sus reservas en los adipocitos blancos.
Cuando la noradrenalina se libera en respuesta a la sensación de frío, se une a
receptores β-adrenérgicos en la superficie de adipocitos marrones y se
desencadena la activación de la adenilato ciclasa, la producción de cAMP (AMP
cíclico) y la activación simultánea de la proteína quinasa dependiente de cAMP
(PKA), siendo el resultado la fosforilación y activación de la lipasa sensible a
hormonas. Los ácidos grasos liberados por acción de esta lipasa, se unen a la
termogenina y desacoplan el gradiente de H+ y la liberación de la energía en forma
de calor (Figura 2). Por tanto, el tejido adiposo marrón o pardo es un sitio clave de
producción de calor, en los mamíferos, mediante la acción de la proteína
desacopladora-1 (UCP1), que incrementa la actividad de la cadena respiratoria y la
desacopla de la fosforilación oxidativa, es decir, impide la síntesis del ATP. El calor
se genera a partir de la combustión de los sustratos disponibles y es distribuido al
resto del organismo a través de la circulación.
Figura 2. Mecanismo de activación de la
termogenina (UPC1). Cuando la noradrenalina
se libera en respuesta a la sensación de frío, se
une a receptores β-adrenérgicos en la superficie
de adipocitos marrones y se activa la adenilato
ciclasa y la producción de cAMP, que activa, a su
vez, a la PKA, siendo el resultado la fosforilación
y activación de la lipasa sensible a hormonas.
Los ácidos grasos liberados se unen a la
termogenina iniciando un desacoplamiento del
gradiente de H+ y la liberación de la energía del
gradiente en forma de calor (+ve se refiere a un
efecto positivo) (SCHNEIDER & SAGAN 2005,
modificado).
Los adipocitos marrones, que expresan la UCP1, también aparecen en el
tejido adiposo blanco en respuesta a diversos estímulos y son conocidos como
adipocitos beige, que se definen por su morfología, el alto contenido de
María Cascales Angosto|24
adipogénesis del tejido adiposo marrón parece también evidente ya que ratones
que carecen de C/EBPα o de C/EBPβ y C/EBPδ, presentan una acumulación de
lípidos reducida en estas células y una expresión disminuida de UCP-1. El receptor
PPARα también está altamente expresado en el tejido adiposo marrón y dado que
PPARα juega un papel muy relevante en la β-oxidación mitocondrial de los ácidos
grasos y que este proceso es muy importante en el tejido adiposo marrón, es
bastante probable que PPARα esté también jugando algún papel en este proceso. El
70% del volumen del adipocito marrón está ocupado por depósitos lipídicos.
Además de adipocitos, el tejido adiposo marrón incluye células endoteliales,
fibroblastos, células perivasculares, mesenquimáticas, preadipocitos, mastocitos y
células de Schwan. Se cree que las células mesenquimáticas podrían dar lugar a las
células precursoras de los adipocitos.
El proceso de termogénesis en los adipocitos marrones se inicia por
liberación de ácidos grasos procedentes de sus reservas en los adipocitos blancos.
Cuando la noradrenalina se libera en respuesta a la sensación de frío, se une a
receptores β-adrenérgicos en la superficie de adipocitos marrones y se
desencadena la activación de la adenilato ciclasa, la producción de cAMP (AMP
cíclico) y la activación simultánea de la proteína quinasa dependiente de cAMP
(PKA), siendo el resultado la fosforilación y activación de la lipasa sensible a
hormonas. Los ácidos grasos liberados por acción de esta lipasa, se unen a la
termogenina y desacoplan el gradiente de H+ y la liberación de la energía en forma
de calor (Figura 2). Por tanto, el tejido adiposo marrón o pardo es un sitio clave de
producción de calor, en los mamíferos, mediante la acción de la proteína
desacopladora-1 (UCP1), que incrementa la actividad de la cadena respiratoria y la
desacopla de la fosforilación oxidativa, es decir, impide la síntesis del ATP. El calor
se genera a partir de la combustión de los sustratos disponibles y es distribuido al
resto del organismo a través de la circulación.
Figura 2. Mecanismo de activación de la
termogenina (UPC1). Cuando la noradrenalina
se libera en respuesta a la sensación de frío, se
une a receptores β-adrenérgicos en la superficie
de adipocitos marrones y se activa la adenilato
ciclasa y la producción de cAMP, que activa, a su
vez, a la PKA, siendo el resultado la fosforilación
y activación de la lipasa sensible a hormonas.
Los ácidos grasos liberados se unen a la
termogenina iniciando un desacoplamiento del
gradiente de H+ y la liberación de la energía del
gradiente en forma de calor (+ve se refiere a un
efecto positivo) (SCHNEIDER & SAGAN 2005,
modificado).
Los adipocitos marrones, que expresan la UCP1, también aparecen en el
tejido adiposo blanco en respuesta a diversos estímulos y son conocidos como
adipocitos beige, que se definen por su morfología, el alto contenido de
María Cascales Angosto|24