Page 88 - Medicamentos fantásticos
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En los textos astrológicos griegos lo recomiendan para quienes
sufren de las rodillas, como remedio a las grandes fatigas y a los dolores
renales. También para aliviar y sanar a quienes están abatidos o poseídos
por los demonios.

Dioscórides,112 tras describirlo, lo aconseja para la tos, la ruptura y
el espasmo nervioso; también facilitaría el vómito, y sería adecuado contra
los mordiscos de serpientes, para sanar llagas sucias y corrosivas, mitigar
las inflamaciones de las tetas y de los compañones, los diviesos y lobanillos.

Aconseja preparaciones para los oídos, los ojos, restituir el cabello
perdido por la tiña, los sabañones y las quemaduras de fuego.

La simiente sería remedio contra la escolopendra y el escorpión.
Bebida su raíz resfriaría el apetito venéreo.
Cratevas (ca. s. II-I a.C.) asegura que bebida una dracma con vino
cura la gota.
En sus anotaciones, Laguna lo considera caliente y seco, lo cual no se
acomoda bien con su influencia saturniana.
Ciprés

El Cupressus sempervirens L., es árbol bien conocido desde antiguo.
Dioscórides no lo describe dado lo habitual de su presencia113.

Recomienda las hojas para retener la orina y refrenar los humores
en general; majadas y puestas sobre las heridas frescas las sueldan y
restriñen la sangre; por sí solas o con harina sirven contra el fuego de San
Antón. Sus frutos se emplean para curar a quienes “arrastran sangre del
pecho”, la disentería, cualquier flujo del vientre, el asma y la tos.

112 Andrés LAGUNA, Pedacio DIOSCÓRIDES, Materia médica op., cit., libr II, cap. CLIX.
113 Andrés LAGUNA, Pedacio DIOSCÓRIDES, Materia médica op., cit., libr. I, cap. LXXXII.

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