Page 95 - A. Doadrio: Quimica Inorganica
P. 95
FARMACOLOGÍA
DEL
LITIO
El
litio
se
emplea
en
forma
de
carbonato
para
el
tratamiento
de
la
psicosis
maníaco
depresiva
bipolar
(actualmente
denominada
trastorno
afectivo
bipolar).
El
trastorno
bipolar
es
una
grave
enfermedad
del
cerebro.
Se
caracteriza
porque
el
paciente
experimenta
cambios
de
ánimo.
A
veces
se
siente
muy
feliz
y
con
gran
actividad
(manía)
y
a
veces
-‐por
el
contrario-‐
muy
triste
y
poco
activo
(depresión).
El
litio
es
tóxico
para
el
ser
humano
en
concentraciones
plasmáticas
superiores
a
4
meq/l,
por
lo
que
hay
que
vigilar
su
concentración
plasmática
durante
el
tratamiento.
El
nivel
plasmático
normal
de
litio
es
de
0,5-‐1,5
meq/l.
La
dosis
recomendada
de
carbonato
de
litio
es
de
300-‐600
mg
diarios.
Su
mecanismo
de
acción,
consiste
en
el
bloqueo
de
serotonina
y
norepinefrina
(neurotransmisores),
además
del
bloqueo
del
glutamato
cerebral
(también
neurotransmisor).
La
toxicidad
del
litio
afecta
a
los
sistemas:
nervioso
central,
neuromuscular,
endocrino
y
renal,
con
un
cuadro
clínico
caracterizado
por
convulsiones,
alteraciones
en
la
visión,
temblor
en
las
manos
(muy
característico
y
síntoma
de
que
hay
que
suspender
el
tratamiento),
poliuria,
glucosuria
e
hipotiroidismo.
En
el
pasado,
también
se
usó
el
litio
en
los
denominados
litines
-‐aguas
alcalinas
litínicas-‐
como
diuréticos.
Actualmente,
los
litines
tienen
su
aplicación
como
aguas
de
mesa
de
calidad.
Se
venden
en
sobres
para
diluir
en
un
litro.
Es
también
un
producto
muy
adecuado
para
excursionistas,
ya
que
la
adición
de
litines
al
agua
de
bebida
o
al
agua
de
nieve
en
alta
montaña
proporciona
al
excursionista
las
sales
minerales
necesarias.
Finalmente
indicar
que
los
litines
es
un
producto
apto
para
deportistas
por
su
contenido
en
sales
y
gracias
a
su
sabor
característico,
calma
la
sed
que
se
produce
al
realizar
un
ejercicio
físico.
CAPÍTULO
4:
METALES
ALCALINOS
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DEL
LITIO
El
litio
se
emplea
en
forma
de
carbonato
para
el
tratamiento
de
la
psicosis
maníaco
depresiva
bipolar
(actualmente
denominada
trastorno
afectivo
bipolar).
El
trastorno
bipolar
es
una
grave
enfermedad
del
cerebro.
Se
caracteriza
porque
el
paciente
experimenta
cambios
de
ánimo.
A
veces
se
siente
muy
feliz
y
con
gran
actividad
(manía)
y
a
veces
-‐por
el
contrario-‐
muy
triste
y
poco
activo
(depresión).
El
litio
es
tóxico
para
el
ser
humano
en
concentraciones
plasmáticas
superiores
a
4
meq/l,
por
lo
que
hay
que
vigilar
su
concentración
plasmática
durante
el
tratamiento.
El
nivel
plasmático
normal
de
litio
es
de
0,5-‐1,5
meq/l.
La
dosis
recomendada
de
carbonato
de
litio
es
de
300-‐600
mg
diarios.
Su
mecanismo
de
acción,
consiste
en
el
bloqueo
de
serotonina
y
norepinefrina
(neurotransmisores),
además
del
bloqueo
del
glutamato
cerebral
(también
neurotransmisor).
La
toxicidad
del
litio
afecta
a
los
sistemas:
nervioso
central,
neuromuscular,
endocrino
y
renal,
con
un
cuadro
clínico
caracterizado
por
convulsiones,
alteraciones
en
la
visión,
temblor
en
las
manos
(muy
característico
y
síntoma
de
que
hay
que
suspender
el
tratamiento),
poliuria,
glucosuria
e
hipotiroidismo.
En
el
pasado,
también
se
usó
el
litio
en
los
denominados
litines
-‐aguas
alcalinas
litínicas-‐
como
diuréticos.
Actualmente,
los
litines
tienen
su
aplicación
como
aguas
de
mesa
de
calidad.
Se
venden
en
sobres
para
diluir
en
un
litro.
Es
también
un
producto
muy
adecuado
para
excursionistas,
ya
que
la
adición
de
litines
al
agua
de
bebida
o
al
agua
de
nieve
en
alta
montaña
proporciona
al
excursionista
las
sales
minerales
necesarias.
Finalmente
indicar
que
los
litines
es
un
producto
apto
para
deportistas
por
su
contenido
en
sales
y
gracias
a
su
sabor
característico,
calma
la
sed
que
se
produce
al
realizar
un
ejercicio
físico.
CAPÍTULO
4:
METALES
ALCALINOS
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