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CAPIdTULO 11
LOS ELEMENTOS QUÍMICOS EN OTROS PLANETAS
SOLARES
La abundancia de hidrógeno y de helio, está bien representada en la
atmósfera de los planetas gaseosos. Júpiter y Saturno poseen una atmósfera
constituida por hidrógeno y helio; la de Neptuno es de hidrógeno, helio y metano y
Urano, tiene una atmósfera de helio y metano.
Sin embargo, la de los planetas rocosos es muy diferente. La de Venus es de
dióxido de carbono (96%), nitrógeno (3%), dióxido de azufre (0,015%), vapor de
agua (0,002%), monóxido de carbono (0,0017%), argón (0,007%), helio
(0,0012%), neón (0,0007%) y trazas de sulfuro de carbono, cloruro de hidrógeno y
fluoruro de hidrógeno. La de Marte, está compuesta por dióxido de carbono,
nitrógeno, kriptón, xenón y argón y la de la Tierra, la más compleja, de nitrógeno
(78,084%), oxígeno (20,946%), argón (0,934%) y cantidades progresivamente
más pequeñas de dióxido de carbono, neón, helio, metano, kriptón, hidrógeno (solo
el 0,000055%), óxido nitroso y trazas de monóxido de carbono, xenón, ozono,
dióxido de nitrógeno, yodo y amoníaco. Además, Marte contiene también hierro,
silicio, magnesio y calcio. De hecho, es el planeta rojo por la abundancia de óxido
de hierro en su superficie sólida. En su suelo, el elemento más abundante es el
oxígeno, seguido de silicio, hierro, calcio y magnesio.
Aunque muy raros en la Tierra, los gases nobles son abundantes en el
Universo y tienen su gran representación en otros planetas. Entonces, es de
suponer que la Tierra primitiva fuese abundante en gases nobles y que se
escapasen de la atmósfera de nuestro planeta. Sin embargo, no tuvo que ser solo
así; por ejemplo, se ha descubierto que xenón y silicio se sustituyen a altas
presiones y temperaturas, por lo que se debió de perder xenón en los abundantes
bombardeos de meteoritos ricos en cuarzo sobre la Tierra primitiva.
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LOS ELEMENTOS QUÍMICOS EN OTROS PLANETAS
SOLARES
La abundancia de hidrógeno y de helio, está bien representada en la
atmósfera de los planetas gaseosos. Júpiter y Saturno poseen una atmósfera
constituida por hidrógeno y helio; la de Neptuno es de hidrógeno, helio y metano y
Urano, tiene una atmósfera de helio y metano.
Sin embargo, la de los planetas rocosos es muy diferente. La de Venus es de
dióxido de carbono (96%), nitrógeno (3%), dióxido de azufre (0,015%), vapor de
agua (0,002%), monóxido de carbono (0,0017%), argón (0,007%), helio
(0,0012%), neón (0,0007%) y trazas de sulfuro de carbono, cloruro de hidrógeno y
fluoruro de hidrógeno. La de Marte, está compuesta por dióxido de carbono,
nitrógeno, kriptón, xenón y argón y la de la Tierra, la más compleja, de nitrógeno
(78,084%), oxígeno (20,946%), argón (0,934%) y cantidades progresivamente
más pequeñas de dióxido de carbono, neón, helio, metano, kriptón, hidrógeno (solo
el 0,000055%), óxido nitroso y trazas de monóxido de carbono, xenón, ozono,
dióxido de nitrógeno, yodo y amoníaco. Además, Marte contiene también hierro,
silicio, magnesio y calcio. De hecho, es el planeta rojo por la abundancia de óxido
de hierro en su superficie sólida. En su suelo, el elemento más abundante es el
oxígeno, seguido de silicio, hierro, calcio y magnesio.
Aunque muy raros en la Tierra, los gases nobles son abundantes en el
Universo y tienen su gran representación en otros planetas. Entonces, es de
suponer que la Tierra primitiva fuese abundante en gases nobles y que se
escapasen de la atmósfera de nuestro planeta. Sin embargo, no tuvo que ser solo
así; por ejemplo, se ha descubierto que xenón y silicio se sustituyen a altas
presiones y temperaturas, por lo que se debió de perder xenón en los abundantes
bombardeos de meteoritos ricos en cuarzo sobre la Tierra primitiva.
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