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núcleos de helio unidos por las fuerzas nucleares y el núcleo de oxígeno, es la
misma materia. Cinco núcleos de helio forman el neón, seis el magnesio, siete el
silicio, ocho el azufre y así sucesivamente, aumentando el número atómico por dos.

Y cada vez que añadimos, pero también si extraemos un protón y suficientes
neutrones para mantener unido el núcleo, formamos un nuevo elemento químico.
Así, si separamos a un solo protón del mercurio y tres neutrones, lo convertimos
en oro. El sueño de los alquimistas, la piedra filosofal. Visto así, parece fácil, pero
hace falta una ingente cantidad de energía.
7.1. Composición del átomo

Las tres partículas básicas que constituyen el átomo, se disponen en un
núcleo, donde se sitúan protones y neutrones y en unas capas externas, los
denominados orbitales atómicos, donde se localizan a los electrones.

Dado que el átomo es eléctricamente neutro, el número de electrones tiene
que ser igual al de protones, por lo que un isótopo, lo que tiene diferente es el
número de neutrones. Así, el hidrógeno tiene tres isótopos: el 1H (protio o
hidrógeno) de masa 1, con un protón y ningún neutrón en su núcleo, el 2H
(deuterio) de masa 2, con un protón y un neutrón y el 3H (tritio) de masa 3, con un
protón y dos neutrones nucleares y para los tres el número atómico es el mismo,
uno (figura 19). Es el único elemento que tiene sus isótopos con nombres y
símbolos diferentes.



Figura 19. Representación orbital y composición de partículas atómicas de los 3 isótopos del
hidrógeno.
52|Capítulo 7: Las piezas básicas para la construcción de los elementos químicos
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