Page 48 - Balneario Villa de Olmedo
P. 48
1.
INTRODUCCIÓN
La
Unidad
de
Radioactividad
Ambiental
y
Vigilancia
Radiológica
del
departamento
de
Medio
Ambiente
del
CIEMAT
ha
realizado
un
estudio
de
la
radiactividad
en
el
manantial
del
Balneario
de
Olmedo.
Este
trabajo
está
englobado
dentro
de
un
estudio
más
amplio
sobre
las
características
generales
de
los
balnearios
españoles
en
el
que
se
incluyen
las
características
radiológicas
de
sus
aguas
mineromedicinales.
Las
aguas
subterráneas
que
circulan
por
la
corteza
terrestre
constituyen
agentes
fundamentales
en
los
procesos
geológicos
de
formación.
Siendo
un
solvente
natural
complejo
y
dinámico,
el
agua
participa
tanto
en
los
procesos
de
disolución
y
transporte
como
en
las
reacciones
químicas
y
en
la
transferencia
de
calor,
gases
y
elementos
químicos.
Como
consecuencia
de
ello
es
el
principal
medio
de
dispersión
y
transporte
de
los
elementos
radiactivos
naturales
a
través
de
la
biosfera
y
de
los
niveles
tróficos
hasta
alcanzar
al
hombre.
Los
isótopos
radiactivos
que
habitualmente
se
encuentran
presentes
en
el
agua,
a
excepción
del
K-‐40,
tritio
y
carbono-‐14
que
son
de
origen
cosmogénico,
proceden
de
las
series
radiactivas
naturales
de
los
radionucleidos
primarios
U-‐238,
U-‐
235
y
Th-‐232,
que
se
encuentran
distribuidos
abundantemente,
aunque
de
forma
desigual,
en
la
corteza
terrestre.
Estos
radionucleidos
cabeza
de
las
series
radiactivas
son
denominados
radionucleidos
primigenios,
ya
que
proceden
de
los
primitivos
materiales
que
se
acumularon
en
la
formación
de
la
tierra,
y
por
sus
largos
periodos
de
semidesintegración
están
aún
presentes.
La
mayor
parte
de
los
otros
radionucleidos
miembros
de
las
series
son
de
periodos
más
cortos
y
se
están
produciendo
continuamente
por
la
desintegración
de
sus
precursores,
de
periodos
largos.
La
mayor
o
menor
concentración
de
estos
radionucleidos
en
las
aguas
viene
condicionada
no
sólo
por
la
mayor
abundancia
en
el
terreno
sino
también
por
las
características
físico-‐químicas
de
cada
uno
de
ellos
individualmente
(solubilidad,
etc.).
Ello
hace
que
los
equilibrios
radiactivos
seculares
entre
los
radionucleidos
existentes
en
los
terrenos
se
alteren
radicalmente
en
las
aguas
que
los
disuelven
y
acumulan.
Un
caso
típico
es
el
Rn-‐222,
cuya
actividad
en
agua
suele
ser
mucho
mayor
que
la
de
su
progenitor
el
Ra-‐226,
de
características
físico-‐químicas
distintas,
a
pesar
de
su
periodo
de
semidesintegración
mucho
más
corto.
4
6|
Análisis
de
la
radiactividad
en
aguas
del
balneario
INTRODUCCIÓN
La
Unidad
de
Radioactividad
Ambiental
y
Vigilancia
Radiológica
del
departamento
de
Medio
Ambiente
del
CIEMAT
ha
realizado
un
estudio
de
la
radiactividad
en
el
manantial
del
Balneario
de
Olmedo.
Este
trabajo
está
englobado
dentro
de
un
estudio
más
amplio
sobre
las
características
generales
de
los
balnearios
españoles
en
el
que
se
incluyen
las
características
radiológicas
de
sus
aguas
mineromedicinales.
Las
aguas
subterráneas
que
circulan
por
la
corteza
terrestre
constituyen
agentes
fundamentales
en
los
procesos
geológicos
de
formación.
Siendo
un
solvente
natural
complejo
y
dinámico,
el
agua
participa
tanto
en
los
procesos
de
disolución
y
transporte
como
en
las
reacciones
químicas
y
en
la
transferencia
de
calor,
gases
y
elementos
químicos.
Como
consecuencia
de
ello
es
el
principal
medio
de
dispersión
y
transporte
de
los
elementos
radiactivos
naturales
a
través
de
la
biosfera
y
de
los
niveles
tróficos
hasta
alcanzar
al
hombre.
Los
isótopos
radiactivos
que
habitualmente
se
encuentran
presentes
en
el
agua,
a
excepción
del
K-‐40,
tritio
y
carbono-‐14
que
son
de
origen
cosmogénico,
proceden
de
las
series
radiactivas
naturales
de
los
radionucleidos
primarios
U-‐238,
U-‐
235
y
Th-‐232,
que
se
encuentran
distribuidos
abundantemente,
aunque
de
forma
desigual,
en
la
corteza
terrestre.
Estos
radionucleidos
cabeza
de
las
series
radiactivas
son
denominados
radionucleidos
primigenios,
ya
que
proceden
de
los
primitivos
materiales
que
se
acumularon
en
la
formación
de
la
tierra,
y
por
sus
largos
periodos
de
semidesintegración
están
aún
presentes.
La
mayor
parte
de
los
otros
radionucleidos
miembros
de
las
series
son
de
periodos
más
cortos
y
se
están
produciendo
continuamente
por
la
desintegración
de
sus
precursores,
de
periodos
largos.
La
mayor
o
menor
concentración
de
estos
radionucleidos
en
las
aguas
viene
condicionada
no
sólo
por
la
mayor
abundancia
en
el
terreno
sino
también
por
las
características
físico-‐químicas
de
cada
uno
de
ellos
individualmente
(solubilidad,
etc.).
Ello
hace
que
los
equilibrios
radiactivos
seculares
entre
los
radionucleidos
existentes
en
los
terrenos
se
alteren
radicalmente
en
las
aguas
que
los
disuelven
y
acumulan.
Un
caso
típico
es
el
Rn-‐222,
cuya
actividad
en
agua
suele
ser
mucho
mayor
que
la
de
su
progenitor
el
Ra-‐226,
de
características
físico-‐químicas
distintas,
a
pesar
de
su
periodo
de
semidesintegración
mucho
más
corto.
4
6|
Análisis
de
la
radiactividad
en
aguas
del
balneario